top of page

Who Tells Your Story?

reimagining Broadway     in rural Nicaragua

Katie Fitzgerald, Fundadora de Teatro Catalina

Quién Cuenta Tu Historia: Juan


¡No vamos a crecer!

- Peter Pan

Cuando miro esta fotografía, me transporta instantáneamente a Neverland. Pero mientras continúo mirando, me trae de vuelta a la realidad de la vida en Nicaragua rural. Veo a Juan, un muchacho de diez años que, a diferencia de Peter Pan, no ha tenido la opción de "querer crecer" o no. Veo las caras de los niños pequeños que han visto y han pasado más cosas en sus vidas cortas que algunas personas hacen una vida entera.

En todo el mundo, los niños se están convirtiendo en cuidadores, proveedores financieros y figuras de padre / madre a una edad muy temprana. Mientras camino por Villa Catalina, veo niños haciendo las tareas del hogar, cocinando y limpiando mientras sus padres están trabajando. Veo a otros niños que van a trabajar con sus padres después de la escuela para que puedan ayudar con las cargas financieras. Y luego veo a niños como Juan, que nunca está sin sus hermanos menores o primos detrás. Veo niños criando niños, niños que nunca realmente tienen la oportunidad de ser un niño.

Está comprobado una y otra vez que el juego es integral para el desarrollo de los niños. Debe ser un derecho inherente a que todos los niños jueguen (y, de hecho, la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño dice que sí lo es), pero a menudo se convierte en lo primero que se va cuando los niños son introducidos en el " mundo actual" y el modo de supervivencia comienza. El juego implica muchas facetas diferentes, pero en su núcleo, se trata de ser un niño. Es lo que los niños hacen mejor. Cuando los niños tienen tiempo para jugar e interactuar con amigos, hay tantos beneficios emocionales, sociales y físicos. El juego realmente prepara a los niños para la edad adulta y enseña habilidades vitales para la vida que no se pueden aprender en ningún otro entorno. Enseña mecanismos de afrontamiento, construye la autoestima, aumenta la empatía y desarrolla habilidades relacionales. Enseña a los niños a ser creativos e imaginativos. Y quizás, lo más importante, crea alegría, permitiendo que los niños experimenten la felicidad en la vida que merecen.

Al principio de la historia, Peter Pan da un argumento convincente de que permanecer un niño para siempre podría ser la respuesta a los problemas del mundo. Al final, sin embargo, Peter Pan es el único que elige no crecer. Wendy, los Niños Perdidos, la Sra. Darling, todos decidieron seguir adelante. La edad adulta, en sí misma, no es mala. A medida que crecemos, somos capaces de experimentar mucho más profundidad en la vida. La lección más valiosa que encuentro en Peter Pan es "dejarlos ser pequeños". Los niños deben tener el derecho a ser niños, aprender y crecer en la infancia, y jugar y disfrutar de la vida sin carga. Y cuando sea el momento de crecer ... entonces estarán listos.

Foto por: Edgard Buenas

¡Vaya detrás de las escenas de nuestra foto inspirada por Peter Pan!

Recent Posts
Follow Us
  • Facebook Classic
  • Twitter Classic
  • Instagram Social Icon
bottom of page